sábado, 22 de marzo de 2008

"Felices Pascuas...La casa está en orden"

3 comentarios:

Anónimo dijo...

hola boquita y hola a todos los que dia a dia hacen posible este blogg.
ya no tengo q pensar ni lo dudo el año pasado a hugo le hicieron 1.000.000.000.000.000 de carpas y paros. todos decian estamos en epoca electoral es por eso !
resulta q era por eso.pero lo manejaba eL sutef q dentro de las escuelas (manejadas por el sutef)todos los dias paro o "se rompia algo "no habia gas ,luz agua sieMPRe una excusa resulta q el fuerte del ari fue el sutef.
coccaro te acostaron los mismos q hoy piden bajar a esta mina!..


S.U.T.E.F = CULPABLES DEL GORBIERNO Q HOY EN DIA Y LAMENTABLEMNETE NOS GOBIERNA!


Y COMO DIJO BOQUITA !!FELICES PASCUAS..


LA CASA ESTA EN ORDEN!!
LA PROVINCIA SE HUNDE !!
PERO LA CASA ESTA EN ORDEN!

Anónimo dijo...

CUANDO TODOS PIENSAN Q ESTE GOBIERNO NO LLEGA A JUNIO LES AFIRMO Q TENEMOS PARA 3 AÑOS MAS TODAVIA
SI LOS REVOLUCIONARIOS Y LOS Q TODOS LOS DIAS HACIAN QUE EN LAS ESCUELAS SE ROMPAN LAS COSAS(S.U.T.E.F).HOY SE DESVIVEN X TAPAR LAS COSAS Q EL AÑO PASADO(GOBIERNO DE HUGITO)HUBIESEN HECHO TODO LO Q TENIAN AL ALCANZE PARA Q LA SOCIEDAD SEPA.
HOY AHAY MUCHISIMAS FALENCIAS EN LOS ESTABLECIEMIENTOS Y EN MUCHAS ENTIDADES DEL GOBIERNO..Y HACEMOS ALGO?
A.T.S.A UNICO GREMIO CON LO HUEVOS BIEN PUESTOS,LO LAMENTABLE ES Q LOS PLATOS ROTOS LOS PAGAMOS TODOS LOS CIUDADANOS Q NOS ATENDEMOS EN EL HOSPITAL.
S.U.T.E.F = CULPABLES DE ESTE GOBIERNO.
DA PENA Q UN GOBIERNO LLEGUE AL PODER POR UN GREMIO HIPOCRITA.

Anónimo dijo...

Existen dos tipos de discusiones. Uno sirve para exponer argumentos bajo la figura del libre razonamientos de ideas. Los jueces lo denominan (en uno de los pocos aciertos de su microlenguaje) las reglas de la “sana crítica”.

El otro tipo de controversia no persigue como fin a la verdad. No interesa resolver el conflicto, llegar a una conclusión acertada, formularse otras preguntas, a decir de Santiago Kovadloff, “más interesantes” que las que acaban de dilucidarse.

Se busca, en este último caso, simplemente legitimar una postura anterior. Pegar un grito de histeria argumentativa para que tenga un efecto, una sensación, un clima, pero que no ayude a resolver nada. No es el objetivo. Se intenta que la estridencia de las palabras, los decibeles perdidos en el espacio, la música de algunas frases ingeniosas, nos distraigan de nuestro único y verdadero problema.

La gran diferencia entre estos modos de confrontar ideas es la intención. La forma productiva es la que caracteriza a los científicos. La superación argumental como avance (y no como competencia) hacia un objetivo mayor. No hay ganadores ni perdedores. Y si los hubiera no interesan. No tanto como mejorar la idea original, perfeccionarla, protegerla de refutaciones ya estudiadas.

La otra forma de discutir es pura destrucción. Absoluta bazofia retórica. Consiste en preconcebir un resultado, para luego emerger de las profundidades del supuesto problema con una solución que no existe. Que nunca existió. Sacar la cabeza del agua para respirar un grito de existencia, de “acá estoy”, de “no soy invisible”.

La verdad es nada más que un adorno para este tipo de mediocres rebatidores de planteos acomodados a su gusto. Sus objetivos se cumplen por el mero hecho de discutir. Lo único que persiguen es corroer a quienes antes de cualquier movimiento ya han clasificado como sus adversarios, como sus enemigos retóricos. Entonces no interesa otra cosa que producir daño. Mellar las calidades del oponente para crear la apariencia de una derrota. Fabricar una contienda donde importe más la forma que el fondo, las luces del camino más que el lugar de llegada, los fuegos de artificio más que el motivo del homenaje.

***

El juez del Superior Tribunal de Justicia Mario Robbio enfrenta varios pedidos de jury de enjuiciamiento desde el año 2005, cuando la Corte en pleno (con el ex juez Ricardo Klass y la actual María del Carmen Battaini) produjo los polémicos fallos que mantuvieron por un tiempo en el cargo al ex gobernador Jorge Colazo, a pesar del avance del proceso de juicio político en la Legislatura.

De todos los pedidos de destitución a los magistrados, hay uno, el que derivó de la presentación realizada por la hoy legisladora Verónica de María, que cuenta con un dictamen favorable a la continuidad del proceso, rubricado por el fiscal de Estado, Virgilio Martínez. En este caso la denuncia trata sobre la falta de publicación en el Boletín Oficial de los gastos del Superior Tribunal de Justicia.

En definitiva, existe una denuncia contra Robbio y Battaini (Klass ya no cuenta por su renuncia al cargo) del año 2005, donde un fiscal del Consejo de la Magistratura dictaminó que debía abrirse el proceso de destitución.

Sin embargo, el Consejo no avanzó en el jury durante dos años, permitió que Robbio acumulara los años necesarios para jubilarse y presentara su renuncia al cargo a fines de 2007.

El entonces gobernador Hugo Cóccaro, en lugar de diferir la aceptación de la renuncia a las resultas del jury, la aceptó de inmediato. Peor aún, la aceptó con cuatro meses de anticipación, con los cual Robbio quedó durante ese período en un lugar privilegiado: podía fallar y no ser controlado por nadie porque, técnicamente, ya estaba renunciado.

¿Qué hizo el Consejo de la Magistratura en ese momento?. Nada. Silencio.

Recién después de la asunción de Fabiana Ríos, el Fiscal de Estado (el mismo que había promovido el jury con su dictamen) le advirtió a la mandataria que había un jury de enjuiciamiento pendiente contra Robbio. ¡Vaya novedad!.

El problema es que ahora hay otros problemas. La renuncia a Robbio está aceptada por Cóccaro. Y esa medida no puede deshacerse por otro decreto. Cualquier persona, por iletrada que sea, podría comprenderlo. Ningún principio de continuidad jurídica aceptaría tamaña barbaridad. “Soy el Estado, hoy te acepto la renuncia, mañana me arrepiento y te la rechazo”. Absurdo.

Sin embargo, se le ha pedido a la gestión de Ríos que “solucione” el problema. Se le ha dicho que “no puede lavarse las manos”, que “demoró la decisión”, que “comunicó mal su postura” (¡¿?!).

Ninguno de los iluminados ha explicado, eso si, de qué manera se podría haber obligado a Robbio a ser enjuiciado por el Consejo de la Magistratura.

La imagen del juez, con el decreto de aceptación de la renuncia en el bolsillo, superando su “depresión” en Mar del Plata, y negándose a concurrir a un hipotético jury con el argumento de su derecho adquirido, es todo un símbolo del disparate que algunos plantean.

Pero aquí estamos, gastando tiempo en explicar lo evidente. Dando lugar a respuestas de los que sólo discuten para destruir.

¿La verdad? Bien, gracias.